Hablar de FU es hacerlo de toda una saga con la que arrancó comercialmente la estirpe deportiva de Seat. Tras diversas evoluciones de estos catorce treinta conocidos internamente con estas siglas, inicialmente con motor 1600 y a partir de 1974 con propulsor 1800, ambas versiones lograron al instante gran popularidad en rallyes, montaña y circuitos, especialmente como vehículo de grupo 1, ya que sin casi modificación alguna era muy competitivo en la categoría. La cilindrada de 1.756cc y una potencia que iba de los 105 a 120 CV, dependiendo de si se utilizaba uno o dos carburadores Weber, hicieron de esta versión prácticamente un coche de competición para pilotos privados, de la que se fabricaron 904 unidades.
La tremenda popularidad del FU, la presencia oficial en competición de la marca con versiones 1430 y principalmente la homologación de una versión 1430 grupo 4 de cara a 1976, al tenerse intención de correr oficialmente el Rallye Monte-Carlo donde no podían competir los grupo 5 (que era la categoría a la que pertenecían hasta la fecha los 1430 "gordos" de Seat Competición), hizo de este modelo el coche de moda. En 1975 la marca española decidió construir alrededor de 20 unidades (no se sabe a ciencia cierta si fueron algunas más) realmente muy valoradas aquellos años y también hoy en día, el FU-11 “Réplica”, unidades escasas y representantes directas de la máxima evolución de la saga 1430. El FU-1800 “Réplica”, precisamente el coche que presentamos hoy, incorporaba una serie de modificaciones claramente pensadas para la competición.
Aunque el equipamiento era casi el mismo en el FU-1800 “Réplica” que en el FU-1800 normal, el primero salía de fábrica con un chasis totalmente reforzado y la jaula de seguridad integrada, además de llevar diversas mejoras que se comentan más adelante. Importante la cilindrada de 1.756cc y su interesante potencia de 135 CV, que acabaron en la mayoría de casos siendo muy superiores a esta cifra.
Joan Jordi (Jordi4 Competición), recuperador y autor de la reconstrucción del FU-11 de Javier Brugué: “Lo bueno de este coche en concreto es que es uno de los 20 auténticos FU-11 fabricados en Seat Competición, lo que equivale a decir que es un réplica de los 1430 oficiales de la marca que fueron posteriormente a Monte-Carlo en 1976, con mejoras muy importantes como carrocería reforzada, etc. Yo lo compré hace años al señor Javier Brugué en muy buen estado, pero tenía que rehacerse por completo después de haber corrido tantos años. Como curiosidad, el capó es el original de la época y sin repintar y conserva los adhesivos de verificación de los rallyes más importantes que realizó, colocados todos ellos en los cristales laterales traseros. Lo he restaurado entero, aunque tiene su motor y caja de cambios originales”.
Este FU-11 (Seat 1430 Especial 1800 “Réplica”) con bastidor nº 008612 fue modificado por el Servicio de Coches Deportivos de Seat y entregado a Javier Brugué el 20 de mayo de 1975. Entre las modificaciones respecto al modelo de serie incorpora 2 carburadores Weber 44 IDF, árboles de levas especiales, colectores de admisión (de origen Juncosa) y de escape especiales, radiador mixto agua-aceite y ventilador mecánico. En cuanto a la carrocería, y además de una estructura reforzada, equipa arco de seguridad integrado, protectores de cárter, faros halógenos Kinby, parabrisas de seguridad laminado (triplex) y cinturones de seguridad tipo arnés. En cuanto a la transmisión, utiliza caja de 5 velocidades de relación cerrada, diferencial autoblocante Borg-Warner y par cónico 9/40.
© JAS Info Service
18 de mayo de 2020 / 16 de junio de 2022