Tras una magnífica temporada 2022 que viene precedida por otras campañas tanto o más brillantes, Miquel Molina González (33 años) llega al Circuit de Barcelona-Catalunya en 5ª posición de las Fanatec GT World Challenge Europe Endurance Cup. Oficial de Ferrari desde hace seis temporadas, Molina es un piloto profesional valorado por la marca y apreciado por los equipos en los que corre, actualmente Iron Lynx en estas GT World Challenge, una brillante tarjeta de presentación ante la cita de casa.
Correr ante los tuyos, ¿aporta presión o, por el contrario, ayuda a esforzarse más?
Las dos cosas, porque si por un lado tienes cerca a tu gente, y eso es bueno para un piloto, a veces tienes que prestar más atención a circunstancias ajenas a las carreras. Pero todo esto no me preocupa, sé muy bien cómo gestionarlo y lo importante es que cuando estás en el box o en la pista te centres al cien por cien en tu trabajo.
El Circuit de Barcelona-Catalunya ¿es especial para ti?
Como pista, el Circuit se me da muy bien, ganamos aquí el año pasado la prueba inaugural de las Le Mans Series y a final de esa temporada fuimos campeones. Otro tema es lo que significa para mí el Circuit, por mi historia en el trazado y lo mucho que he rodado en él. En todo caso, deportivamente la carrera no tiene porque ser distinta a las otras, todas tienen sus particularidades y al final lo que decide la situación de un equipo es la propia organización con el BoP (Balance of Performance o equilibrio de rendimiento) para hacer que se igualen las prestaciones de los coches. Y eso, al ser la última carrera del campeonato, será decisivo.
En el recuerdo está la carrera de 2019, cuando siendo favoritos perdisteis el título...
Sí, fue una desilusión muy grande, perdimos el campeonato por 1 sólo punto, pero debo decir que aquel revés nos hizo más fuertes y eso en mi caso se ha notado en las temporadas posteriores, hemos ganado carreras de todo tipo y también campeonatos, esto es lo importante, avanzar tras los sinsabores que puedas sufrir.
Háblanos del Ferrari 488...
Es un coche que se mantiene competitivo a pesar de que lleva seis años compitiendo sin muchos cambios, eso demuestra su alto nivel de competitividad aunque esté casi al final de su ciclo de vida. Nosotros tenemos un punto muy fuerte respecto a la competencia: lo bien que trata el 488 los neumáticos, eso nos permite llegar al final de los relevos con un ritmo mucho más elevado. Por poco que el BoP se ajuste bien, aspiramos al podio.
¿Qué tipo de resistencia prefieres?
Me gustan todas las carreras y sinceramente creo que rindo en todas por igual, pero mi preferencia está en las carreras de 6 horas para arriba, porque de alguna manera son competiciones en las que tiene más importancia la estrategia y siempre es posible recuperar si sufres algún contratiempo.
Tras 7 años en Audi llevas ya 6 en Ferrari, eso lo puede decir poca gente...
Estoy muy cómodo en Ferrari. Aprecian y valoran lo que hago y eso se nota mucho cuando tienes que dar el máximo de ti al volante. Lo he ganado todo en GT con ellos y lo más probable es que siga en la marca el próximo año.
¿Qué queda de aquel ilusionado Jove Pilot del Circuit de Catalunya de los 2000?
Pues queda una buena parte de lo que consigo ahora con el Ferrari 488 GTE Evo. Y un recuerdo imborrable, claro, además de mucha gratitud hacia todos los que hicieron posible aquel bonito proyecto.