Estos monoplazas, creados por Tony Southgate, compitieron tres años el P153 (de 1970 a 1972) y cuatro el P160 (de 1971 a 1974), ambos logrando las últimas victorias de British Racing Motors en el Campeonato del Mundo de Fórmula 1. BRM siempre tuvo grandes pilotos aunque sus resultados no pudieron igualarse a los de otros equipos británicos. Con todo, es de justicia afirmar que la historia deja bien patente que BRM fue, con mucho, un equipo “so British” hasta la medula y logró además algunos éxitos remarcables.
Los P153 y P160 estaban impulsados por sendos motores BRM V12 de 3.0 litros y el equipo oficial de inicios de los 70, denominado Yardley BRM, dio paso posteriormente al Marlboro BRM, aunque la escasez de resultados y el dominio y competencia de otros fuertes constructores británicos como Lotus, Tyrrell o McLaren les fue marginando hasta su desaparición.
Aunque por pura conveniencia fotográfica para honrar a dos grandes pilotos que tuvo BRM nos centramos sólo en estos modelos, es de justicia mencionar que BRM fue fundada en 1945 y que obtuvo 17 victorias en Grandes Premios (cinco de ellos el de Mónaco) y dos títulos mundiales de Fórmula 1, uno de constructores y otro de pilotos (Graham Hill), ambos en 1962.
Los pilotos de los que ofrecemos fotografías de José Luis Cortijos en este post son grandes corredores de carreras, término acuñado por Josep Casanovas, y ambos, tras participar –con suerte diversa– en el Gran Premio de España de Montjuich 1971 fallecieron trágicamente en carreras durante la segunda mitad de ese año: el mexicano Pedro Rodríguez y el suizo Joseph Siffert, dos leyendas del automovilismo internacional.