Las declaraciones de Massimo Biasion son una adaptación de las que el periodista de Autohebdo, Loïc Rocci, publicó el pasado 29 de abril. Las reproducimos para demostrar cómo se hacían las cosas en aquellos efervescentes años 80, en los que había abundancia de medios para competir y se daban oportunidades a los pilotos con talento.
A finales de 1982 Massimo Biasion, 24 años, era piloto de Opel Italia y conducía un magnífico Ascona 400 de Conrero. La lucha en el campeonato italiano se ceñía principalmente entre el piloto de Bassano del Grappa y Tonino Tognana, que utilizaba un Ferrari 308 GTB pero que en las últimas pruebas pasó a pilotar un Lancia Rally 037 de la Jolly para contener los fuertes embates de su rival.
El Opel Ascona 400 había ganado el italiano de rallyes un año antes con Tony Fassina pero la escuadra no pudo reeditar el triunfo en 1982, al final ganó Tognana, pero la actuación del joven Biasion no pasó desapercibida. Al concluir, a mediados de noviembre, el Rallye di San Marino, que ganó Tognana y el 037 por delante de Biasion y el Ascona, Roberto Angiolini y Claudio Bortoletto, los grandes capos de la Jolly Club, citaron a Biasion para tener una reunión.
En aquellos momentos el prometedor Biasion ya estaba renovado de palabra por la Conrero Squadra Corse, de modo que su futuro seguía con el equipo de Opel Italia y, además, cobrando una buena ficha. Angiolini y Bortoletto le expusieron el programa que le ofrecían para 1983 (europeo e italiano con un 037), aunque con un salario muy inferior al que cobraría en Conrero. Miki no se lo pensó dos veces, sacrificó el dinero para poder hacer un programa importante en el extranjero y además con la espectacular máquina de Lancia, para cuyo equipo cualquier piloto italiano soñaba fichar.
Según declaraciones de Biasion al periodista francés al que aludíamos en el encabezamiento, Roberto Angiolini le dijo a Miki: “Mira, no sabemos aún si eres realmente bueno... pero preferimos tenerte en nuestro equipo que como adversario. Vente con nosotros... así podremos ver si eres rápido”. Encaje de manos y pocas semanas después Biasion ya estaba probando un Lancia Rally 037 en la pista del centro de pruebas de Fiat en la Mandria, cerca de Turín.
Nada más demostrar sus habilidades, antes incluso de que arrancara su nuevo programa deportivo en el Rally Costa Brava de 1983, Biasion conoció a Césare Fiorio, que le dijo: “Miki, correrás para la Jolly Club pero también colaborarás con nosotros en el desarrollo del 037 para Abarth”.
Biasion arrancó un victorioso 1983 con una incontestable victoria en el Costa Brava. Todo el mundo, la prensa por supuesto, se aprendió el nombre de Biasion, que corrió 12 rallyes esa temporada y ganó 7 (Costa Brava, RACE, Costa Smeralda, 4 Regiones, Ypres, Madeira y San Marino), además de lograr otros dos podios. Con Tiziano Siviero inició así su conocido reinado. El resto ya es otra historia, pero todo eso demuestra que hay momentos en los que si se está en el lugar y con las personas adecuadas no se puede dudar ante una decisión que puede cambiar tu vida.
